Algunos textos nacieron por el 2006, eran voces que me atravesaban. Ahora las renuevo subiéndolas al blog, como si fueran fotos viejas de rostros que ya no tengo pero que me gusta recordar y compartir.

Otros textos son imágenes que me visitan, que se superponen, que quedan sueltas, amontonadas, a los gritos y en silencio. Imágenes que van y vienen, me abrazan o me escupen, y yo ahí escribiéndolas.

martes, 22 de marzo de 2022

Arroz apelmasado (II)

Podría decirte algo del amor?

Solo te pido que me lo sirvas con una porción de arroz.

¿De que se trata todo esto?

Vos solo tenés que ubicarte, date cuenta que escribo sin mirar, pero sé.

Sé hacer el amor con vos, sé dejarme ahogar el alma hasta que me rebalsa y me siento siempre tan profunda, siempre tan atravesada por este encuentro de tu cuerpo sarnoso de amor y el mío.

Sale algo de violencia, ¡pero nada! ¡es normal! 
Sale algo de celos, ¡pero nada! ¡es  normal!
¿Ser humano es normal?
Me siento rara.
¿Es normal?

Orquídea por orquídea colgaría de cada lágrima al pedo, lágrima a la carta, a la basura, y a pura infidelidad, a puro calor, vapor, pudor, pupilas explotadas, violetas amarronadas y un par de tulipanes fértiles hasta la manija… ¿o estaban vencidos?

No hay comentarios:

Publicar un comentario