Tengo derecho a comerme mis restos
tengo todo el derecho a despellejarme
a ir soltando mis pétalos de piel
y decir mientras caen:
"me quiero - no me quiero"
me doy el derecho a dudarme
a cansarme, o no querer verme
a engañarme con otra
a salir de mí
a entrar en otras - yo - que me distraigan por un rato
y que, por favor!
no me dejen pensar.
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